En la parte oeste central de México habita la etnia huichol, una de las pocas que se ha mantenido “pura” desde la llegada de los españoles. La religión de los huicholes es un compromiso en su existencia y sus distintas formas de expresión.
Mi calavera es un homenaje a ellos, a sus creencias animistas, que sostiene que cualquier elemento del mundo natural esta dotado de alma y su interrelación entre el mundo de los vivos y el de los muertos.
Los animales que aparecen son habitantes y testigos en el desierto, donde realizaban sus rituales con peyote, su cactus sagrado. “Una maximización del espíritu nos conducirá hasta el punto de la transformación temporal en transición a la exaltación espiritual, para encontrar las fuerzas del equilibrio”
A nivel visual, el águila como figura central (deidad descendiente del sol) simula las cejas, la serpiente de cascabel simula los dientes, los conejos simulan las mejillas, los armadillos son los ojos entreabiertos y los asteriscos representan peyotes como decoración. La utilización de la técnica lineal está basada en sus cuadros de estambre (hilo), una tradición ancestral.
Están en algún sitio / nube o tumba
están en algún sitio / estoy seguro
allá en el sur del alma
Fragmento de “Desaparecidos”
Mario Benedetti
Esta calavera está dedicada en memoria a los desaparecidos de México, personas que por su ideología, han sido privadas de su libertad y muy probablemente, de su vida.
Joan X. Vázquez
Los días en los que se ven los volcanes desde la Ciudad de México son especiales. Son pocos, contados… El Popocatepetl y El Iztaccihuatl, entre los que cruzó Hernán Cortez y admiró maravillado la Gran Tenochtitlán. Cómo se habrá visto eso! Ni en sus más locos sueños podría haber imaginado un lugar así. Una ciudad construida sobre el agua, con grandes pirámides blancas y un entramado de canales que la comunicaba. Una increíble metropolis, sostenible, eficiente, limpia y ordenada. Con grandes cultivos flotantes de maíz, de jitomate, de chile. Con sus extraños animales, sus perros calvos, sus salamandras felices, sus flores, sus magueyes. Moctezuma sabía que alguien vendría… el cometa se lo contó. Lo que ni Españoles ni Aztecas sabían en ese momento era que estaban a punto de vivir algo que sacudiría sus mundos. Que cambiaría todo para siempre. Que daría vida a lo que hoy es México y España. Qué lejos estoy del suelo donde he nacido, es verdad. Pero no del todo… de aquí vengo también.
Las cuatro milpas, es una canción popular mexicana.
Dedicada a los miembros de mi familia mas sabios, ésta calavera es un tributo a ellos, todo comienza desde la tierra y todo reencarna en lo mas hermoso y libre, las flores y los pájaros.
Peleando con el mal siempre triunfa la armonía.
Esta calavera esta llena de simbolismos que representan todas las cosas que me hacen como persona y que celebro cada día, desde mi primo pequeño, que es alimentado con la leche de los viejos árboles del mundo de los muertos y reencarnado en ave, hasta mis abuelos, que pelearon contra el hambre y trabajaron arduamente para mantener una familia.
A todas las sabias abuelas que vuelven a nacer como hermosas flores.