Max Rippon es un artista newyorkino, sin embargo sus trabajos no tienen nacionalidad, ya que tiene la afición de diseminarlos por todo lugar que tocan sus pies. Efímero e irónico, ha decidido establecer el poder de su discurso en la síntesis que la propia palabra le significa. Es indiscutible el placer lúdico que provoca la búsqueda de las distintas derivas y el resultante de combinar infinidad de veces los elementos de contexto, palabra, imagen y espacio, ofreciéndonos un ente total dotado de múltiples significados y dimensiones que no alcanzan a dividirse entre la caligrafía, tipografía fantástica, la fonética y el discurso político.
Este mes, Cosmo desea invitarlos a este espacio donde intentaremos atrapar brevemente la rabia urbana que emana del trabajo de nuestro artista.